domingo, 23 de junio de 2013

Wenceslao Maldonado: Mi reino será el mar.


Wenceslao Maldonado.























(1)

distancia
así palabra suelta
en el vaivén del mar
como la luz o como el aire
y esa gaviota traslúcida en su vuelo
el misterio siempre el misterio
de lo insondable

(2)
el mar es mi riqueza
aunque yo le pertenezco
la mirada lejana y el por qué
las preguntas que vienen con las olas
una queja de espumas que se quedan
muriéndose en la playa
es causa de esta gloria que me invade
del reino sin fronteras
y un poder del agua que se escurre
mi corona de sol la fantasía
en el instante mínimo
de decirme que existo en lo indecible
el regalo perfecto
de una inmensa vida


(3)

alucinaciones del pasado
de lo que yo no fui
reflejos de un futuro
de lo que quiero ser
montando las ondulaciones del agua
como el pez escurridizo
en los deseos esquivos de la vida
con las escamas de plata
reverberando
fulguraciones de esperanza

(4)
el mar es la mirada
de mi deseo inquieto
dilatada llanura
sin palabras
de lo que no alcanzo a saber
quién es el que contempla
la extensión desconocida
del corazón
quién mira a quién

(5)
incansable el mar
lamerá la hoguera
de mis pasiones
sepultará las cenizas
de mi historia
llevará a otras orillas
la melodía pálida
de mis poemas

(6)
abrazo de las constelaciones en la altura
que abajo reciben
sobre la superficie tranquila
millones de noctilucas movedizas
y entre cielo y agua
la intensidad del silencio

(7)
tal vez esté sumergido
el territorio de mis deseos
escondido oculto inalcanzable
en la profundidad de los años
en el enigma de la vida
isla hundida
a la que no llego nunca
más que con la imaginación
de los lugares inhallables

(8)
no sé si indagar más
en lo profundo en lo variable
si se nos da sólo el posible
panorama extendido de la luz
o la emoción gigante
de las tormentas
mar
y todo el reino desconocido
mientras creemos saber el más allá
en el puerto imposible
de nuestro destino

(9)
cuerpo bello
del dios hecho hombre y bronce
hecho pez y tritón
dios sumergido monstruo inmenso
revolviéndose en el abismo
cuerpo feroz de borrascas
cuerpo sutil de silencios
de corales madreperla y nácar
cuerpo dios de caballos nadadores
dios de la furia y de las olas
de la inundación y las mareas
cuerpo de espuma
dios dureza y metal
plantado en la muralla de sus rocas
dios desnudo en las playas
firme al pie de continentes
invasor de las islas
cuerpo de arena
desparramándose balbuciente
líquido sonoro
misterio incalculable de sus aguas

(10)
quién soy
pregunta el mar
luz desparramada respondo
las aguas incontables
el misterio
que no puede decirse
dice el mar
y yo digo el miedo
la tormenta la furia
la destrucción y la muerte
y él responde
soy la vida
secreta
de todas las cosas
soy arrullo
y el suave recamo
de la espuma
y yo pregunto
quién soy
mientras alto el albatros
pareciera sobrevolar la indiferencia
quién soy
la paciencia
de soportar el misterio
responde
esa voz lejanísima
del mar

Wenceslao Maldonado (Buenos Aires, 1940) Poeta, cuentista, dramaturgo.
En poesía publicó, entre otros títulos: La estación necesaria (1990), El hombre herido 
 (1994), Tierra intranquila (1994), Dioses del deseo antiguo (1995; 2° premio Concurso “Centenario”, Sociedad Italiana XX Setiembre, 1994), Si cortarle la cabeza a la Gorgona (1997; 1er. premio XIX Encuentro Patagónico de Escritores, Pto. Madryn, 1996), Ceremonial de una familia oscura (1997; finalista concurso “Ramón Plaza”, 1996),  Requiem de Guerra (2012),  Diálogo de Pájaros (2012), Hay un amor que espera y que no olvida (2012) y la versión bilingüe de Si Cortarle la Cabeza a la Gorgona / If cutting off the head of the Gorgon, traducción de Donny Smith (2012).